Las esponjas Luffa son reptantes y pueden desarrollar enredaderas de hasta 5 metros (16 pies), como es el caso de las esponjas de lufa que se muestran en esta foto y que están creciendo/reptando desde el Tower Garden® más lejano del fondo. Utilizamos una estructura metálica superior para permitir que las enredaderas crezcan hacia fuera de la torre.
Al igual que con cualquier otro cultivo trepador, estamos en contra de utilizar los puertos de plantación inferiores y dejar que la planta crezca en el suelo. De hecho, una de las mayores ventajas de la tecnología Tower Garden® es la reducción de plagas e insectos en comparación con el cultivo convencional en el suelo. Permitir que las plantas crezcan en el suelo hace que estén expuestas a todo tipo de insectos, plagas y patógenos, que son inexistentes cuando se cultivan fuera del suelo.
No estamos diciendo que el cultivo fuera del suelo erradique los problemas de plagas, insectos, hongos, etc., si no que este enfoque vertical reduce en gran medida el riesgo de problemas.
Las plantas de lufa dan generosas cosechas de frutos que se utilizan como esponja vegetal. Cuando el fruto de la lufa es pequeño (20 cm/8 pulgadas) también es comestible.
En comparación con el cultivo de otras cucurbitáceas, ya se trate de calabazas, calabacines o pepinos, las plantas de lufa no tienen hongos ni enfermedades como el virus de mosaico. Las esponjas de lufa se desarrollan muy bien cuando se cultivan con la tecnología Tower Garden®.
Cuando el fruto de la lufa es pequeño (20 cm/8 pulgadas), es comestible.